MICROFINANZA
Nuevo récord del euro frente al dólar
Superó los $1.60
El euro alcanzó un nuevo nivel histórico el martes, cruzando brevemente la barrera de los $1.60 durante la jornada vespertina en Europa, luego de que un par de gobernadores del Banco Central de Europa dijeron que la alta inflación podría llevar a la institución a incrementar las tasas de interés.
20 centavos en cinco meses
El euro llegó hasta los $1.6002 antes de retroceder a los $1.5968, por encima de los $1.5916 en que se cotizó en Nueva York la tarde del lunes. El euro se elevó 20 centavos ante el dólar en apenas cinco meses y 10 centavos en solamente dos.
La moneda empleada por 15 naciones europeas registró su anterior alza histórica el jueves pasado, ubicándose en los $1.5982. Bajó el viernes, luego de que un alza en Wall Street generó optimismo respecto al final de la peor época dentro de la crisis en el mercado crediticio estadounidense, pero subió nuevamente cuando el informe de ganancias del Bank of América fue más malo de lo esperado.
La caída del dólar es beneficiosa para las empresas estadounidenses que dependen de las exportaciones, pero afecta a los viajeros en todo el mundo mientras se incrementa la inflación, los costos de los viajes aéreos se elevan y los precios, desde la cerveza en Munich hasta el vino en París, pasando por los paseos en góndola de Venecia, se incrementan.
La crisis mundial por el encarecimiento de los alimentos obliga a los países que importan gran parte de lo que consumen a buscar alternativas para incrementar su productividad y defenderse del embate de los precios.
En esta coyuntura, la biotecnología puede ser una alternativa para enfrentar la inseguridad alimentaria, indicó Elizabeth Hodson de Jaramillo, especialista en el tema, de la Pontificia Universidad Javeriana, de Colombia.
Hodson indicó que el país debe evaluar todas las posibilidades que la biotecnología ofrece en el campo agrícola y determinar cuál se apega a la realidad. Para la especialista, “Tendrían que determinarlo de acuerdo a las condiciones del país, tendrían que analizar si mejorar las (semillas) criollas o si introducen las nuevas (genéticamente modificadas)”, afirmó.
Sin embargo, el uso de biotecnología obligaría a las autoridades a crear una política nacional agrícola, definida por todos los sectores involucrados, indicó Hodson, desde productores, hasta usuarios y consumidores.
Ahorro
Si bien es cierto, la semilla transgénica es más cara que la criolla, la especialista colombiana afirmó que los costos para los pequeños productores se reducen.
Al ser más resistente a las plagas, indicó, se disminuye el uso de plaguicidas y también se obtienen mejores rendimientos de los cultivos, en la misma extensión de tierra.
http://www.elmundo.com.sv/Mambo/index.php?option=com_content&task=view&id=10673&Itemid=27
Un principio esperanzador fue para muchos la llegada del Presidente Elías Antonio Saca a la Presidencia de la República. Hace cuatro años muchos salvadoreños que tenían el sinsabor de la administración Francisco Flores, le dieron el beneficio de la duda a un joven empresario radial.
Los graves problemas seguían abatiendo a los salvadoreños, altos porcentaje de desempleo, ola de homicidios y delincuencia, e igual alto costo de la vida, seguían siendo el dolor de cabeza luego de tres administraciones de Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
“Las mujeres ya no estarán solas”, “A los malacates se les terminó la fiesta”, “Hagamos Aquipo”, “ “Lo social no es el complemento de nada sino la base de todo”, y el slogan principal “Un gobierno con sentido humano”, habrían calado el primer año de administración, en donde Saca alcanzó una nota de 6.56, una de las más altas calificaciones obtenidas en comparación a los otros mandatarios.
Asimismo, el Jefe de Estado se mostró abierto al diálogo con el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y se hizo repetitiva la frase “yo nunca me canso de dialogar, dialogar y dialogar”, “y si el diálogo falla, lo volveremos a intentar”, repetía frecuentemente, y el cuento de El Salvador más humano y el gobierno abierto a conciliar, había comenzado para los salvadoreños que dieron el voto a Saca, que fueron más de un millón.
Los promocionados programas de Súper Mano Dura, para contrarrestar la delincuencia, la Red Solidaria, el Fondo Solidario para la Salud, (FOSALUD), fue el punto álgido de una historia que muchos consideraron no sería más de lo mismo.
Seguramente por eso Saca obtuvo en el primer año la nota más alta de todos los anteriores mandatarios que fue de 6.50.
Pero han pasado cuatro años y aún cuando su administración ha lanzado muchos programas nuevos, estos no terminan de hacerse realidad. Además otras promesas nunca se han cumplido como la prometida seguridad antidelincuencial y las oportunidades de empleo, ¿será por eso que el presidente obtuvo su peor nota en los últimos días?: 5.47.
Héctor Vidal, empresario salvadoreño, conocido por sus análisis críticos a la realidad nacional, considera que el Presidente Saca tenía todo para no terminar con tan baja nota, pero ahora no le queda más que intentar por lo menos en su último año no terminar peor.
Otros, consideran que la crisis del petróleo y alimentos, además de los procesos políticos dentro de su partido, han terminado por resquebrajar la imagen del Jefe de Estado.
A pesar que los números están indicando que las cosas no las ha hecho bien y la credibilidad del Presidente hoy más que nunca pende de un hilo, el Presidente insiste en que nunca el país ha experimentado tanto progreso y cambios como en su periodo.
Las exportaciones han mejorado gracias a los Tratados de Libre Comercio con Estados Unidos, además la economía creció a un ritmo jamás registrado, afirma.
Además, rompió con el estancamiento de 8 años del sector agropecuario y agroindustria, y se ha hecho la inversión más grande en hospitales públicos, carreteras y el Programa de Red Solidaria, se adelantó a la crisis alimentaria.
47 municipios de pobreza extrema severa que equivale a 48 mil familias, comenzaron a recibir transferencia directa de dinero por $15 y $20 dólares mensuales, que es una recomendación que hasta ahora están haciendo los organismos internacionales.
Así también 160 mil estudiantes pudieron ahorrarse la matrícula de este año, y 13 mil mujeres afiliadas al Instituto Salvadoreño al Seguro Social (ISSS) recibirán todo el 100% de su salario cuando tengan que parir, entre otras cosas.
Aunque Saca, entregó recientemente semilla mejorada para sembrar 400 mil manzanas de tierra, los agricultores solamente agradecen el esfuerzo, pero lamentando que los altos precios de los insumos agrícolas los están terminando.
La última encuesta de la Universidad Centroamericana, indica que 80.4% de las personas opinan que la situación económica ha empeorado para ellos, además el 52% considera que con Saca no han tenido ningún cambio positivo.
Por todas estas razones, todo indica que las expectativas generadas por el presidente, ahora se revierten para no terminar con el cuento feliz, que los salvadoreños habían construido a raíz de las promesas que hizo.
http://www.diariocolatino.com/es/20080531/nacionales/55541/
Los precios récord de los alimentos y el peligro de hambruna en los países más pobres serán los principales temas a discutir en la cumbre que la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) celebrará del 3 a 5 junio en Roma.
Los precios de los productos básicos agrícolas se moderarán respecto a los recientes niveles récord, pero en los próximos diez años se espera que su media se sitúe muy por encima de los niveles medios de la última década, según el último informe Perspectivas Agrícolas elaborado por la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) y la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
El actual alza de los precios golpeará sobre todo a las personas que sufren la pobreza y el hambre, en especial a los compradores netos de alimentos en las zonas urbanas y a los que no los producen en las zonas rurales de los países con escasos ingresos. Es necesario movilizar la ayuda humanitaria para hacer frente a esta dramática situación, pero para alcanzar soluciones sostenibles y evitar nuevos casos en el futuro, se debe hacer énfasis en estos países para mejorar su producción y productividad agrícola así como el crecimiento y un mayor desarrollo económico.
“La manera de hacer frente al alza de los precios alimentarios no es a través del proteccionismo, si no abriendo los mercados agrícolas y liberando la capacidad productiva de los campesinos, que de forma repetida han demostrado que saben responder a los incentivos del mercado”, señaló el Secretario General de la OCDE, Angel Gurría, al presentar Perspectivas Agrícolas 2008-2017 en París. “Los Gobiernos -añadió- pueden también hacer más para impulsar el crecimiento y desarrollo de los países pobres, como mejorar el poder adquisitivo de los compradores de alimentos más vulnerables”.
Los precios alimentarios y su impacto en la economía mundial serán una de las cuestiones abordadas en la reunión del Consejo ministerial de la OCDE en París del 4 al 5 de junio de 2008. En otro encuentro que tendrá lugar en Roma, del 3 al 5 de junio, Jefes de Estado y de Gobierno de todo el mundo discutirán las políticas y estrategias para mejorar la seguridad alimentaria mundial y relanzar la agricultura en las comunidades rurales de los países en desarrollo.
“La comunidad internacional necesita urgentemente una acción coherente para hacer frente al impacto del alza de precios sobre las personas pobres y hambrientas”, subrayó el Director General de la FAO, Jacques Diouf en la conferencia de prensa de lanzamiento de Perspectivas en París. “Hoy en día -explicó- cerca de 862 millones de personas sufren hambre y desnutrición. Ello nos recuerda la necesidad de reinvertir en agricultura. Debería estar claro ahora que la agricultura necesita volver a la agenda del desarrollo”.
Al comparar las medias de la próxima década con las de la década pasada, está previsto que los precios reales (precios nominales teniendo en cuenta la inflación) se incrementen en un abanico que va desde menos del 10 por ciento en el caso del arroz y el azúcar, por debajo del 20 por ciento el trigo, cerca del 30 por ciento la mantequilla, los cereales secundarios y semillas oleaginosas y en más del 50 por ciento los aceites vegetales, según el informe.
Los precios pueden hacerse también más volátiles debido a los niveles de las reservas, que seguirán siendo bajos, ya que una parte de la demanda de productos básicos agrícolas no reacciona ante las variaciones de precios. El incremento reciente de fondos de inversión en mercados de futuros de productos básicos puede convertirse igualmente en un factor adicional que influya en las variaciones de precios. El cambio climático también puede afectar a la producción agrícola y a los suministros de forma impredecible.
El informe advierte que la sequía en algunas de las principales regiones cerealeras del mundo, en un contexto de reservas bajas, fue un factor importante -aunque transitorio- detrás del alza de precios en los dos últimos años. Hay otros factores de tipo permanente: los precio altos del petróleo, la evolución de la dieta, la urbanización, el crecimiento económico y el aumento de la población, que también son importantes y están detrás de las previsiones de precios medios de los alimentos más elevados en la próxima década con respecto a la pasada.
El aumento de la demanda de biocombustibles es otro factor que contribuye a la subida de precios. La producción mundial de etanol se triplicó entre 2000 y 2007, y se espera que se duplique de nuevo desde ahora a 2017, para alcanzar los 127 000 millones de litros anuales. La producción de biodiesel aumentará desde 11 000 millones de litros anuales en 2007 a cerca de 24 000 millones de litros en 2017. El crecimiento en la producción de biocombustibles provoca mayor demanda de cereales, semillas oleaginosas y azúcar, con lo que se contribuye a mantener altos los precios.
En los países de la OCDE, al menos, este crecimiento de la producción de biocombustibles ha sido promovido hasta ahora sobre todo por medidas políticas y el informe indica que no está claro que la seguridad energética y los objetivos medioambientales y económicos de estas políticas se alcancen con las tecnologías de producción actuales. Por ello se sugiere que se revisen estas políticas.
El costo de las principales materias primas alimenticias se ha duplicado en los últimos años. Alimentos como el arroz, el maíz y el trigo marcaron niveles récord.
Algunos precios se ubican en un máximo de 30 años, en términos reales.
La FAO argumenta que la escalada de los alimentos agudizaría la situación de 850 millones de personas que ya sufren de hambre.
En los últimos meses se han desatado protestas por los precios de los alimentos en varios países en desarrollo, incluyendo algunas naciones africanas, Haití y Bangladesh.
En los países más pobres, las personas podrían gastar más de la mitad de sus ingresos en alimentos, mientras que por ejemplo en Alemania deben destinar un 10 por ciento.
Entre otras conclusiones del informe, destacan las siguientes:
• Tanto el consumo como la producción de todos los productos básicos agrícolas, excepto el trigo. están creciendo con mayor rapidez en los países en desarrollo. Para 2017 se espera que estos países lideren el comercio de la mayor parte de los productos agrícolas.
• Los precios altos beneficiarán a la mayoría de las explotaciones comerciales tanto en los países desarrollados como en aquellos en desarrollo. Sin embargo, muchos de los campesinos en los países en desarrollo no están conectados al mercado y no se beneficiarán de los altos precios previstos.
• Los mercados cerealeros permanecerán con dificultades de suministro, ya que es improbable que se vuelva a los niveles altos de reservas de la pasada década.
• El consumo de aceites vegetales, tanto los procedentes de las semillas oleaginosas como el aceite de palma, crecerá más deprisa que el de otros productos agrícolas en los próximos 10 años. Este aumento se debe a la mayor demanda para alimentos y para producir biocombustibles.
• El porcentaje de Brasil en la exportación mundial de carne podrá alcanzar el 30 por ciento en 2017.
Muchos factores están detrás del alza de los precios de los alimentos, entre los que figuran la sequía que afectó a grandes países productores como Australia, la creciente demanda por alimentos en las economías de rápido crecimiento como China y la India, los altos precios del petróleo que han impulsado los costos de producción y una caída de los inventarios.
Los expertos también responsabilizan a los programas de los biocombustibles, a cuya producción se han destinado tierras antes utilizadas a los cultivos de consumo humano, así como a las restricciones de exportación fijadas por algunos países.
Tanto la FAO como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) prevén que los precios de los alimentos permanezcan altos durante la próxima década, a pesar de las abundantes cosechas anticipadas para este año.
La reunión fue convocada el año pasado para discutir el impacto del cambio climático y de los biocombustibles sobre los suministros alimenticios, pero ahora el alza de los precios de los alimentos será la prioridad de la agenda.
Unos 40 jefes de Estado participarían del encuentro.
Aunque la reunión no es una conferencia de donantes, los líderes mundiales emitirían un comunicado sobre las medidas a tomar para enfrentar la escasez de alimentos.
Jacques Diouf, jefe de la FAO, dijo que en el corto plazo la comunidad internacional debería garantizar ciertos niveles de ayuda alimentaria para las personas que sufren hambre en los países más pobres.
Asimismo debería ser relajadas las restricciones a las exportaciones que algunas naciones productoras de arroz fijaron para garantizar los suministros domésticos.
En el mediano plazo también se debería garantizar que los pequeños agricultores obtengan las semillas y fertilizantes para el próximo ciclo se cosecha.
En el largo plazo, la FAO afirmó que el mundo debe aumentar la inversión en agricultura en los países en desarrollo, ya sea en la irrigación, las microfinanzas, el transporte y el almacenamiento.
Dos temas particularmente controversiales son los biocombustibles -energía producida a partir de alimentos como el maíz y el aceite vegetal- y los cultivos genéticamente modificados.
Tanto Estados Unidos como la Unión Europea tienen políticas pro biocombustibles que según muchos expertos deberían ser modificadas.
http://elmercuriodigital.es/content/view/10288/1/
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